Santísima
muerte me entregó a tus brazos para pedirte que me socorras, pues ya no puedo
seguir así. Querida Niña Negra que con tu guadaña y tu túnica negra sé que me
cuidarás, quiero pedirte que acabes con toda la energía negativa que me rodea y
las personas que sólo han llegado a causarme problemas.
Mi
querida santísima negra, sé que con tu protección nada podrá detenerme y podré
cumplir todas las metas que me proponga. Tú, niña que eres la dualidad, que no
permitirás que el mal aparezca en mi vida, me entrego a ti para pedirte que me
cuides y acabes con toda la magia negra que me rodea.
Gracias
santísima muerte negra que me has escuchado, me has brindado tu protección y yo
tu amado devoto, me entregaré plenamente a ti y siempre hablaré de todo lo que
haces por mí. (Pide tu deseo), gracias santísima, pues sé que esto ya ha sido
concedido. ¡Gracias!, ¡Amén
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